La mesa Las Dos Fridas (en portugues las dos fridas esta en ingles las dos fridas) fue pintado en 1939 y es uno de los cuadros más famosos de la artista mexicana Frida Kahlo (1907-1954).
La obra consta de dos autorretratos, realizados al óleo, y pretende sobre todo plantear cuestiones de identidad.
En el lienzo pintado en 1939 vemos un autorretrato doble. Ambas Fridas miran directamente al espectador, cara a cara, y usan atuendos completamente diferentes.
Frida, que está del lado izquierdo de la pantalla, lleva un vestido blanco de estilo victoriano con mangas abullonadas y cuello alto. La tela parece refinada ya que hay muchos detalles, que típicamente tienen una estética europea. Frida que se encuentra del lado derecho de la pantalla, a continuación, viste un traje típico mexicano.
Los dos están sentados en un banco verde, cabeza de paja sin respaldo, no uno frente al otro. Los únicos vínculos entre ellos son tres arterias, que conectan el corazón expuesto de uno con el corazón expuesto del otro, y tomados de la mano.
Análisis de la obra las dos fridas
1. El trasfondo
Detrás de la pantalla hay un cielo oscuro cubierto de nubes. Una situación inquietante, tal vez mostrando que Frida está fragmentada.
¿Podría haber una tormenta en las nubes? ¿Servirían como advertencia de un futuro turbulento? haría un símbolo de la agitación interna experimentada por el pintor?
2. Ropa
Los trajes se utilizan en la pintura para diferenciar las dos personalidades de Frida que vivían juntas.
Por un lado, vemos su influencia europea y la relación que establece el pintor con la antigua región a través del clásico vestido blanco, con mangas generosas y mucho encaje. Por otro lado vemos un traje Tehuana, prendas que representan al México auténtico, colorido, con colores vivos y más piel a la vista. La ropa escogida hace referencia a la herencia de su madre, de Oaxaca.
Estas representaciones muy diferentes del pintor enfatizan la dualidad existente, los opuestos que había dentro de ellasu herencia genética y la relación que establecieron con su propio país.
3. El retrato que porta Frida
En Frida ubicada en el lado derecho del lienzo, notamos que el autorretrato lleva algo que, si se mira de cerca, puede identificarse como la imagen del pintor muralista Diego Rivera cuando era niño.
Diego fue el gran amor (y también el gran tormento) de la vida de Frida, no hay posibilidad de que con la mano izquierda sujete la imagen, de la que sale la expresión de una vena que va directo al corazón.
Cabe señalar que en el año en que se pintó el lienzo (1939), la pintora se estaba separando de su esposo.
Es extraño ver cómo el retrato de Diego (que funciona casi como una especie de amuleto), está a la misma altura que la vena cortada con las tijeras quirúrgicas presentes en la mano de la europea Frida.
4. Piernas abiertas
Una de las características fuertes de la pintora mexicana fue la relación que estableció con su propia sexualidad. Si bien los vestidos presentes en el cuadro son corteses -con faldas largas, cuellos altos- es posible detectar según los matices del tejido la ubicación de los elementos principales.
Especialmente en Frida, quien viste el traje mexicano, podemos observar la posición de sus piernas más abiertas, invocando la cuestión de la sexualidad.
5. Los corazones expuestos
En la imagen vemos dos corazones expuestos ya que los autorretratos presentan una imagen con el pecho abierto. En ambos, este es el único órgano que se destaca, sirviendo como símbolo que conecta las dos representaciones de Frida.
Cabe señalar que en la mano de Frida, ubicada en el lado izquierdo del lienzo, vemos unas tijeras quirúrgicas cortando una vena. Por lo tanto, de esta vena brota la sangre que tiñe el vestido blanco, manchándolo. El blanco aquí es bastante simbólico ya que hace referencia al puritanismo de Europa en comparación con los colores brillantes y la postura más relajada de la Frida mexicana.
tú los corazones expuestos simbolizan la centralidad del afecto y la importancia del sentimiento en la personalidad de Frida.
6. La sentencia
Las dos imágenes de Frida tienen rostros similares, en ambos casos vemos expresiones cerradas, duras y cerradas en los autorretratos.
Con un aire de absurdo, las dos personalidades de Frida parecen reflexionar sobre la vida y el destino.
7. Atar las manos
No son sólo las venas de los dos corazones las que unen a las dos Fridas. Si este tipo de conexión se refiere a una conexión más emocional, también es importante resaltar que las dos expresiones también se unen a través de las manos.
Tomarse de la mano puede simbolizar la unión intelectual de las dos personalidades de Frida.
Los autorretratos
Frida comenzó a pintar autorretratos sistemáticamente después de tener un accidente a los dieciocho años mientras viajaba en un autobús. El artista resultó gravemente herido y tuvo que estar hospitalizado durante mucho tiempo.
Acostada, sola, sin nada que hacer, a sus padres se les ocurrió la idea de ofrecer caballetes y pinturas y dispusieron una serie de espejos en la habitación, para que Frida pudiera verse desde diferentes ángulos. Así comenzó la creación de sus autorretratos.
Sobre el tema, el pintor mexicano dijo:
"Me pinto porque estoy solo y porque soy el sujeto que mejor conozco"
Aspectos del trabajo y la ubicación.
Hasta entonces las dos fridasde grandes proporciones, 1,73 m de alto por 1,73 m de ancho.
Actualmente reside en el Museo de Arte Moderno de la Ciudad de México.
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